sábado, 19 de noviembre de 2011

"Por ahí volaba yo..."

Estuve buscando consuelo en algo que no existía. Una adicción más sana que cualquier otra, pero que a Don Quijote le costó más cara que su lanzada a los molinos.
Palabras. Y que conste que lo digo con sarcasmo.
En plena vida, en plena búsqueda, todavía sigo mirando por encima del hombro si aparecerá una solución más fácil que se me ha pasado por alto. ¿Por qué? Bueno… los atajos siempre son atractivos y traicioneros, a su manera. 

Tengo muchas ganas de besar unos labios que hagan latir mi corazón, de un empujón que haga desaparecer la palabra “rutina” del diccionario, de una inmersión total en un sitio que no haga falta respirar, saltar desde un trampolín y sentir la adrenalina antes de caer al vacío. ¡Quiero que las palabras vengan a mi boca tan rápido como los pensamientos!
Tengo hambre.
¿Qué estoy buscando?
                                                        No lo puedo encontrar con palabras.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Precarta ilegal

Lo siento. Muchísimo. Por prometer algo y que tarde tanto en hacerse realidad. No me sobran excusas: poco tiempo, muchas inquietudes, millones de pajaritos revoloteando por mi cabeza... Pero a ti, como siempre, voy a decirte la verdad. No sé ser lo que quiero, ni hacer lo que quiero. No te preocupes, pienso aprender de mí a ser como yo. Tiene que ser fácil por definición. Además, ahora es donde tengo que demostrar lo que valgo, y va en juego mi futuro al completo. Tengo ante mí la prueba, y sólo se gana o se pierde, somos muchos con el mismo sueño y sólo los mejores van a alcanzarlos. Diez entre mil. Un 0.1% en el que aspiro a estar. Y estoy convencida de que lo lograré, ventaja con la que no cuenta la mayoría.
Aquí llueve y hace frío. El viento hace que las contraventanas golpeen con fuerza el marco. Pero no las cierro. Quiero helarme y sonreír.
Tendría que estar escribiendo reflexiones para un pobre desgraciado que pretende saber lo que ignora y ser lo que no existe. Pero en vez de eso, prefiero dejar las cosas para el último momento. Tú eres más importante. Aunque últimamente tengo la creatividad en números rojos, y tengo que re inventarme y mejorarme para impresionar a los que juguetean con mis expectativas.
Varias ideas se agolpan, empujan, arañan y muerden unas a otras por salir, por escaparse por esta ventana al mundo con tal de que lleguen a ti. Aaah, no, acordamos resucitar un fósil de las costumbres de antaño.
Llueve, y las aceras están mojadas.
Y huele a tierra mezclada, y mis músculos están contraídos.
Qué fácil y bonito sería volver a antaño. Ser siempre la niña brillante con un futuro brillante que nunca llegaba. El problema es que acaba de llamar al timbre, y cientos de niños brillantes se están peleando por abrir. Todos brillantes. Como el arroz. Así de simple.